Los daños crónicos del ADN celular, son una de las bases del desarrollo de la mayoría de los cánceres (01). Ya que de esa manera las células normales, pueden transformarse en células cancerosas. 

Y muchos estudios indican que los alimentos ricos en antioxidantes pueden ayudar a contrarrestar dicho daño genético (02).  Y debido a que las frutas son uno de esos alimentos, este estudio ex vivo lo puso a prueba en un cultivo de células humanas (03).

Y cuando dicho cultivo de células, fue expuesto a muestras sanguíneas del grupo que bebió un zumo de naranjas previos a la extracción de sangre. 

Se pudo observar una disminución significativa del daño del ADN celular en dicho cultivo.

Sin embargo, el grupo que bebió (previamente a la extracción) un zumo de agua con azúcar y vitamina C, no tuvo los mismos beneficios. 

Por lo que los autores del estudio terminaron concluyendo: